martes, 30 de diciembre de 2014

Civilización, Estado y Ciudad en el valle de Supe hace 5,000 años

Las investigaciones arqueológicas desarrolladas en el valle de Supe durante los últimos 20 años vienen arrojando valiosa información correspondiente a etapas excepcionalmente antiguas de la Civilización Andina, muchas de las cuales eran desconocidas tan sólo hace algunas décadas atrás. Hoy, gracias a estos trabajos, resulta evidente reconocer que la Civilización Andina tiene una antigüedad similar a las otras primeras grandes civilizaciones del mundo y este hecho, por sí mismo, refleja el enorme legado que ello representa para la historia de la humanidad.

Precisamente en esta línea, la reciente aparición de la publicación “20 años recuperando la historia de la Civilización Caral para el Perú y el mundo, con responsabilidad social” nos brinda un panorama actualizado sobre los resultados de estos trabajos de investigación desarrollados en el milenario valle de Supe, bajo la conducción de la arqueóloga Ruth Shady Solís. Al mismo tiempo, nos coloca en una inmejorable perspectiva para entender la verdadera trascendencia de estas investigaciones en el escenario de las actuales investigaciones sobre los orígenes de la civilización en el planeta, tal como lo desarrollamos en este artículo. 


Carátula de la importante publicación: "20 años recuperando la historia de la Civilización Caral para el Perú y el mundo, con responsabilidad social", bajo la producción y edición de Ruth Shady, Marco Machacuay, Pedro Novoa y Edna Quispe. Lima, Zona Arqueológica Caral / MC, primera edición, 2014.

lunes, 22 de diciembre de 2014

Los "alfareros golondrinos" y la importancia de la producción cerámica itinerante en la historia de la Civilización Andina

La alfarería ha tenido un rol muy importante en la historia de la Civilización Andina. Si bien las vasijas de cerámica suelen ser frágiles, sus fragmentos no lo son y precisamente gracias a ello los arqueólogos han contado con un valioso material para interpretar la evolución de las sociedades andinas durante los últimos 3,500 años. La explicación tradicional en estos estudios indican que estas vasijas de cerámica fueron elaboradas tanto para uso local, en la propia comunidad de los alfareros, así como para intercambiarlas con otras comunidades, sean vecinas o distantes.

Sin embargo, hasta la fecha muy poca atención se ha brindado a una forma de producción de estas vasijas que tiene igualmente una tradición ancestral: el trabajo realizado por los alfareros estacionalmente itinerantes llamados también “alfareros golondrinos”, es decir, aquellos que salen de su “pueblo base” para producir vasijas domésticas en otras comunidades llamadas “pueblos destino”. Al respecto, las importantes investigaciones del arqueólogo peruano Gabriel Ramón Joffré permiten ahora poner en nueva perspectiva las verdaderas características de esta forma de producción itinerante, obligando quizá no sólo a replantear la concepción tradicional del ciclo de vida del alfarero sino también, al mismo tiempo, a realizar una nueva lectura del milenario pasado andino a partir de los vestigios de la cerámica. 


Portada del libro: "Los Alfareros Golondrinos. Productores itinerantes en los Andes" del arqueólogo peruano Gabriel Ramón Joffré publicado en Lima, por IFEA - Sequilao Editores, agosto de 2013

jueves, 18 de diciembre de 2014

Los Wari y sus posibles influencias en el Tawantinsuyo: el dilema de la presencia histórica del aimara y del quechua en el valle cusqueño

Recientes investigaciones parecen ubicar el territorio originario del quechua ya no en la costa sino en la sierra centro-norteña peruana, mientras que con relación al aimara, las evidencias parecen indicar que este idioma habría tenido más bien una localización inicial costeña, específicamente en la zona centro-sureña peruana, con proyecciones hacia las estribaciones serranas inmediatas.

Al respecto, resulta importante destacar que ambos idiomas milenarios han acompañado a las sociedades que dieron origen a las últimas grandes formaciones estatales surgidas en territorio andino entre los siglos VIII al XV de nuestra era. Sin embargo, las modernas investigaciones no logran aún definir cómo se dio el proceso de desarrollo y expansión de ambos idiomas en esos casi 8 siglos de intensos cambios en el panorama político, económico y social del mundo andino, que va desde el apogeo de los Wari hasta los tiempos del esplendor del Tawantinsuyo, época ésta que concluye precisamente con la violenta invasión europea ocurrida a inicios del siglo XVI.


Posibles zonas de influencia de los Wari entre los siglos VII - X d.C. Según algunos autores, las elites de esa época eran aimara hablantes, mientras que otros investigadores señalan más bien que eran  quechua hablantes.  Gráfico: http://todosobrelahistoriadelperu.blogspot.com/2011/07/desarrollo-de-la-cultura-wari.html

sábado, 13 de diciembre de 2014

¿El idioma quechua tuvo un origen costeño?

Desde inicios del siglo pasado, algunos investigadores empezaron a inclinarse por la posibilidad que la costa peruana hubiese constituido el territorio original del idioma quechua y que durante los últimos milenios de la historia de la Civilización Andina su expansión progresiva le permitió asentarse en diversos lugares de la amplia geografía andina, como por ejemplo en la sierra sur peruana.  A través de esta visión, la adopción del quechua como idioma oficial del Tawantinsuyo, durante el apogeo de las elites cusqueñas a partir del siglo XV, habría representado tan solo un peldaño más en esta larga historia.

Sin embargo, diversos estudios en los últimos años han empezado a cuestionar estas hipótesis y recientes trabajos parecen arrojar datos importantes que abonan las nuevas tesis que señalarían más bien un origen serrano de este idioma. Así, los nuevos postulados que indican su origen en la sierra centro-norteña peruana muestran interesantes perspectivas que llevarían a revisar una serie de planteamientos desarrollados durante las últimas décadas acerca de la evolución y base geográfica de este milenario idioma andino, tal como la analizamos en el siguiente artículo.


La milenaria historia del idioma quechua sigue generando nuevas hipótesis sobre sus verdaderos orígenes así como las razones por las cuales llegó a convertirse en el idioma oficial del Tawantinsuyo a partir del siglo XV

lunes, 8 de diciembre de 2014

Nuevas aproximaciones sobre el Aimara, el Quechua y la "lengua secreta" de las elites cusqueñas durante el apogeo del Tawantinsuyo

Aunque tradicionalmente se ha sostenido que el idioma quechua habría tenido como su punto de origen a la región cusqueña y que a partir de la expansión del Tawantinsuyo durante el siglo XV alcanzó su gran difusión por la amplia geografía andina, las modernas investigaciones apuntan a demostrar que esta afirmación carece de una adecuada base histórica. Así, los avances logrados en materia de lingüística andina en la segunda mitad del siglo pasado apuntan a afianzar, en contraposición a las tesis tradicionales, la hipótesis que fue el idioma aimara el que tuvo un carácter primordial y omnipresente en toda la región de los Andes centro-sureños en los inicios del Tawantinsuyo.

Al respecto, los importantes trabajos desarrollados por el investigador peruano Rodolfo Cerrón-Palomino en las últimas décadas brindan resultados muy interesantes que arrojan mayores luces sobre este apasionante asunto vinculado con un capítulo importante en la historia de la Civilización Andina previa a la invasión europea. Al mismo tiempo, la profundidad de sus investigaciones nos permiten incluso aproximarnos a descifrar el misterio de la llamada “lengua secreta” que habrían manejado las elites cusqueñas durante la época de su apogeo a fines del siglo XV e inicios del siglo XVI. 


Rodolfo Cerrón-Palomino y sus importantes explicaciones sobre el Quechua, el Aimara y el Puquina en la época del apogeo del Tawantinsuyo, en el vídeo de Aula Abierta de la Pontificia Universidad Católica del Perú: https://www.youtube.com/watch?v=wrNhgePezTM