sábado, 28 de enero de 2012

¿La felicidad y las relaciones laborales son compatibles?

La felicidad es definida generalmente como una condición interna de satisfacción y alegría que propicia paz interior, un enfoque positivo del entorno, al mismo tiempo que favorece la conquista de nuevas metas. La llamada psicología positiva ha puesto sobre el tapete en los últimos años el enfoque basado en el planteamiento que el mejor camino para ayudar a las personas a ser más felices debe partir, en primer lugar, del reconocimiento de sus propias potencialidades así como de sus enormes posibilidades

Quizá en el mundo de las relaciones laborales, este asunto puede resultar especialmente sensible. Partiendo del tradicional reconocimiento del concepto de la relación de dependencia en los contratos de trabajo, durante décadas se consideró como algo natural que la seguridad y estabilidad laboral  estuviese en manos casi exclusivamente de los empleadores y de las posibilidades de éstos para mantener a las personas en sus puestos de trabajo de manera indefinida, olvidándose prestar atención al hecho si dichas actividades rutinarias contribuían con la felicidad personal o colectiva de millones de trabajadores. ¿Esta visión ha venido cambiando en los últimos tiempos a la luz de la influencia de la psicología positiva?

Las relaciones laborales y la búsqueda de la felicidad pueden obtener un enorme beneficio complementario. Foto:

sábado, 21 de enero de 2012

Caos vehicular y la inversión para el desarrollo en América Latina: hacia una nueva estrategia

Un hecho que puede observar fácilmente quien visita cualquiera de las grandes ciudades latinoamericanas en la actualidad, es la marcha caótica de miles de vehículos que circulan diariamente por innumerables calles congestionadas. Esta cotidiana situación, además de las terribles molestias que genera para los transeúntes y conductores, involucra costosas pérdidas de horas-hombre, exceso en consumo de combustibles, costo ambiental, efecto en la salud humana, pérdida en oportunidades de negocios, entre otros conceptos. Según diversas mediciones, este caos vehicular cuesta a nuestros países miles de millones de dólares anuales.

¿Podemos seguir dándonos el lujo de derrochar esos millonarios montos que se pierden anualmente por el caos vehicular? ¿Es concebible que los países latinoamericanos dejen de utilizar esos importantes recursos en áreas que son verdaderamente prioritarias para impulsar el desarrollo económico y social de millones de personas?


El impresionante caos vehicular de Ciudad de México, hecho cotidiano que se repite en las principales ciudades latinoamericanas. Fuente: www.mexico.cnn.com

sábado, 14 de enero de 2012

El trabajo decente y la mejora de las condiciones de empleabilidad en América Latina

Diversos autores han coincidido en destacar en los últimos años que es imprescindible para el futuro de América Latina avanzar en la recuperación de la autoestima y en la nueva preparación de habilidades laborales si queremos aprovechar los ingentes beneficios que significaría utilizar plenamente la amplia fuerza de trabajo de la que se dispone a escala regional. Para ello, se precisaría incorporar paulatinamente a los mercados de trabajo formales a millones de personas que habitualmente desarrollan sus vidas laborales en el todavía mayoritario y precario círculo de la informalidad.

Este cambio de visión debería estar enmarcado, por supuesto, en el concepto acuñado por la OIT de trabajo decente, el cual implica la existencia de oportunidades para que los hombres y mujeres puedan conseguir un trabajo adecuado y productivo en condiciones de libertad, equidad, seguridad y dignidad humana.
La mejora de las condiciones de empleabilidad está muy vinculada al desarrollo de las nuevas habilidades laborales que precisan los mercados de trabajo latinoamericanos

viernes, 6 de enero de 2012

Los quipus de Tupicocha. ¿Descubriendo los enigmas del sistema milenario de escritura andina?

    
Los quipus, según lo señalado popularmente por diversos investigadores, representaron un sistema nemotécnico. Estuvieron compuestos por cuerdas de lana o algodón y nudos de uno o varios colores desarrollados y perfeccionados por la Civilización Andina durante los últimos milenios. Si bien la mayoría de autores coinciden en que fue usado como un sistema de contabilidad por los quipucamayoc (khipu kamayuq) o especialistas en su lectura antes de la invasión europea al territorio andino, podría haber sido usado también como una forma de escritura, hipótesis que ha venido cobrando fuerza en los últimos años. En la actualidad se conservan en museos alrededor del mundo aproximadamente 750 quipus prehispánicos cuya información aún no ha podido ser descifrada plenamente.

El destacado antropólogo norteamericano Frank Salomon, discípulo de John Murra y presidente de la influyente American Society for Ethnohistory (2004), empezó hace algunos años atrás las investigaciones sobre los quipus que aún se conservan en San Andrés de Tupicocha, una ancestral comunidad campesina de la Provincia de Huarochirí ubicada en la zona de sierra del Departamento de Lima, en Perú, publicando los primeros resultados de sus estudios en el 2007 en castellano bajo el título “Los Quipocamayos. El antiguo arte del khipu en una comunidad campesina moderna”. Como se analizará en este artículo, los trabajos de Salomon constituyen un importante aporte en la tarea de descifrar el misterio que ha encerrado en las últimas centurias el uso de los quipus por parte de las milenarias sociedades andinas.

Portada del libro de Frank Salomon "Los Quipocamayos: el antiguo arte del khipu en una comunidad campesina moderna", donde se desarrollan los resultados de las importantes investigaciones del autor sobre el uso de los quipus en San Andrés de Tupicocha, en Perú.